Edi Pou (Vivalanumeración): «La música popular puede ser tan compleja como la culta»

Edi Pou es un músico que, sin sacrificar ni un ápice de calidad en la ejecución de sus canciones, siempre demuestra originalidad, capacidad de sorprender y, en el buen sentido de la palabra, extravagancia. Llevamos ya un buen puñado de años pudiendo disfrutar de esta faceta suya en Za! y Los Sara Fontan, grupos en los que, entre otras cosas, se encarga de tocar la batería. Su otra faceta es la de periodista y desde 2018 podemos gozar de lo que supone extrapolar su carácter como músico a la radiodifusión en Vivalanumeración. Este es un programa de radio en el que Edi, de una manera increíblemente amena, nos deleita con su buen gusto y sabiduría sobre música, con especial atención a las canciones con características rítmicas peculiares.

 

 

Esta es ya la cuarta temporada del programa, pero creo que la peculiaridad del mismo permite remontarnos a su origen. ¿Cómo surge la idea de hacer Vivalanumeración? ¿En qué momento decides hacer un programa de radio dedicado a patrones rítmicos poco frecuentes?
La idea surge de mi trastorno obsesivo-compulsivo por clasificar. Antes de hacer el programa, ya configuraba listas ordenando las canciones por sus características rítmicas o tonales, independientemente del estilo y la época. Me gusta contar y analizar la música por dentro, es otra forma de gozar de ella. Quizá por eso me gusta tanto el minimalismo de gente como Steve Reich o Terry Riley, porque su música (muy influenciada por la polirritmia de la música popular africana) se basa en el cruce de compases, en crear texturas donde el cerebro intenta encontrar dónde está el “uno”, pero la respuesta a esa pregunta es múltiple y cambiante.
Dicho esto, cuando me propusieron de hacer un programa para la red de radios comunitarias de Barcelona (XRCB), sólo tuve que poner palabras entre los temas de esas listas que ya tenía. Una vez me puse a hacerlo, me di cuenta de que disfrutaba compartiendo mi trastorno, y de que había otra gente que disfrutaba escuchándolo.
Otro motivo por el que decidí centrarme en la estructura de la música por dentro es la voluntad militante de ignorar la música por fuera, de no centrarme en estilos, en escenas, en modas, en ghettos culturales… Creo que deseaba mostrar, con ejemplos, que la música popular puede ser tan compleja como la culta, o que culturas muy distintas comparten patrones similares.

 

Aunque has demostrado que en esto de los ritmos no hay prácticamente límites, en esta cuarta temporada has decidido dar un pequeño volantazo y reinventarte radiofónicamente con una serie de capítulos temáticos (con ritmos impares siempre, eso sí) y nuevos y sorprendentes giros narrativos. ¿Sentías que se había agotado la fórmula?
Sí: antes de empezar la temporada pensé que no quería repetir un año más de programas clasificados por compases y ritmos. Me aburría la idea, e imaginé que las numerarias y numerarios que escuchan el programa también se aburrirían. Aproveché 10 días de confinamiento «covidiano» en pleno agosto para repensar la fórmula y decidí clasificar las canciones en base a las sensaciones que nos producen. Misterio, rabia, euforia, calma, espiritualidad… Una fórmula que me permitía, una vez más, superar la barrera de estilo, época, escena musical. Eso sí, todas las canciones tienen que poseer alguna de las peculiaridades tratadas en las temporadas anteriores: cambios de ritmo, compases impares, polimetrías, notas infinitas, música sin ritmo alguno, música con cambios de ritmo constantes…
En cuanto a los “giros narrativos”, también empecé a aburrirme de mí mismo, de mi voz, de hacer de periodista radiofónico musical al uso. “La siguiente canción es un melocotonazo”, yatusabes. Como no trabajo en Radio 3, me puedo permitir probar formas distintas y absurdas de presentar las canciones, trucando mi voz, grabando cinco voces que gritan al unísono, hablando conmigo mismo, o conversando con un lector de texto robótico. Y a la buena gente de Radio Primavera Sound no sólo les parece bien, sino que lo celebran.

 
Siendo un programa de periodicidad mensual, más que el proceso de grabación, que también daría para hablar (sobre todo después de escuchar los programas más recientes), me gustaría conocer cómo es el proceso de preparación de un capítulo de Vivalanumeración. ¿Hay canciones que ya tengas en mente antes de incluso de empezar a idear un programa? ¿Cuánto tiempo te suele llevar completar el setlist? ¿Decides el tema de cada programa cada mes o los tienes ya decididos y ordenados al principio de cada temporada? ¿Sueles recordar con facilidad canciones que se ajusten a cada capítulo o te cuesta dedicarle unas cuantas horas a escuchar y hacer cuentas?
Para empezar, las listas están ahí, antes de que existiese Vivalanumeración, y se van agrandando cada día, cada vez que descubro una canción con un patrón rítmico interesante. En las tres temporadas anteriores, la temática de cada programa ha funcionado así: cuando una de estas listas tenía suficiente buen material para convertirse en programa, la convertía en episodio. En la cuarta temporada, en cambio, he hecho una enumeración previa de 11 sensaciones musicales que voy tratando mensualmente, episodio a episodio.
Antes de grabar, le destino un día entero, o dos, a configurar un setlist que sea suficientemente diverso, investigando músicas que no son tan cercanas a mi background musical, que es el rock experimental. Es ahí donde disfruto más, aprendiendo nuevos sonidos, documentándome sobre otras épocas, sobre culturas musicales infrarrepresentadas… Aprendo mucho haciendo este podcast, y esa es quizás la mayor recompensa.
Grabar es siempre rápido, sin muchas segundas tomas. John Coltrane decía que la primera toma era casi siempre la buena. En mi caso, no es que la primera sea buena, es que la segunda toma es peor que la primera, y la tercera es peor que la segunda. Así que me quedo con la primera.

 

 

En el pasado, en algunas entregas, exploraste la opción de los remixes, creando tus propias remezclas para ajustar canciones populares al ritmo que tocara en cada ocasión. ¿Es algo en lo que te hayas planteando profundizar más en próximas temporadas? ¿Y fuera del programa?
Los remixes impares (como convertir un tema de Nirvana, Sinatra, Billie Eilish o Bad Bunny a compás de cinco) son muy divertidos de hacer, pero también me aburrí del chiste y en esta temporada no lo estoy haciendo. A ver qué ocurre en la próxima…

 

Este es un programa que lleva aparentemente una carga de investigación alta, lo que desde mi punto de vista lo convierte ya en algo gratificante de hacer. Pero por concretar, ¿qué has descubierto gracias al programa que te haya sorprendido o agradado especialmente?
He descubierto muchos artistas, palos tradicionales, escenas enteras, que si no me hubiese puesto a investigar para el programa seguirían siendo desconocidas para mí. Eso es un regalo inmenso. Recuerdo descubrir y devorar toda la música de Meredith Monk (y preguntarme por qué no la conocía antes y sí conocía a tantos colegas suyos, todos hombres), o fascinarme con la música tradicional tanto de los Bosavi de Papúa como los pigmeos Mbuti, un amasijo de polirritmias muy simples a nivel individual, pero complejísimas cuando las escuchas en conjunto. Es una metáfora que me encanta y que nos recuerda que para hacer música increíble no hace falta tener una técnica increíble, sino estar dispuesto a escuchar, a poner atención y dedicación al colectivo.

 

Supuestamente has grabado entregas de Vivalanumeración, al menos en parte, en un coche en marcha, viajando en tren e incluso en medio del bosque. ¿Cuál es el lugar más raro en el que has grabado o ideado algo para el programa? ¿Hay algún lugar peculiar en el que te gustaría hacerlo?
La mayoría de estos programas en sitios curiosos fueron grabados así… ¡por necesidad! A menudo, la fecha de emisión del programa se acerca y me encuentro de gira. El del tren fue porque me iba a Suiza con Los Sara Fontan, otro en el que estoy de paseo por una ciudad me encontraba en Alemania con ZA!… Siempre intento aprovechar estas circunstancias y sacarle partido: por ejemplo, cuando me iba a tocar con ZA! & la TransMegaCobla a Huesca y compartía coche con Tarta Relena, el día anterior me preparé la playlist de sólo voces y percusiones para comentarla con ellas mientras conducíamos, y luego convertirlo en el episodio “Voces y Percus” de Vivalanumeración.

 

Hablemos de otros podcasts. Aparte del tuyo, entre mis favoritos actuales están ‘Pop y muerte’ (de Kiko Amat y Benja Villegas, también en Radio Primavera Sound), ‘Media Offline’ (de Carlo Padial, para Playground) y, uno que empecé a escucharlo cuando lo recomendaste en el programa, ‘Infrashow’ (de Miguel Noguera). ¿Qué otros podcasts recomendarías tú?
Me gustaría que hubiera más podcasts de música arriesgada, y si los hay, no los conozco. Uno de los pocos podcasts musicales que escucho cada semana es el Independent Music Podcast, donde en cada episodio presentan 10 nuevas canciones muy variadas entre sí, pero todas comparten ese riesgo, esa sorpresa, esa apuesta fuera de lo normal que agradezco.
En Radio Primavera Sound -donde se emite Vivalanumeración- creo que Andrea Gumes y Ana Pachecho son muy muy buenas abordando cualquier tema con frescor, rigor e inteligencia. Fuera de la música, otro podcast que escucho casi cada semana es Today in Focus de The Guardian: 30 minutos diarios centrados en sólo UNA noticia, tratada a fondo y con especialistas.
Y bueno, luego está el Infrashow de Miguel Noguera, que para mí no es un podcast, ni son episodios: es una performance artística de envergadura que se extiende en el tiempo. Tengo la suerte de haber trabajado y actuado con él hace años, y en momentos de flaqueza del Infrashow -porque es una apuesta dura y desagradecida- le he escrito algún Whatsapp para decirle que, para mí, lo que hace en el podcast con las palabras es lo mismo que hacía Cecil Taylor con las notas: improvisación libre. Pero no free jazz, sino una libertad REAL que supera los estilos, que se vacía totalmente de contenido, que no es nada que se haya dicho antes, porque no se está diciendo absolutamente NADA. Es una obra de arte, es un tratado de filosofía wittgensteniana y al mismo tiempo es un chiste malo, tedioso y que se está alargando mucho.

 

 

El otro día estaba en casa de un amigo y encendió la radio. No recuerdo cuando fue la vez anterior que había escuchado un programa de radio en directo en esta era de contenidos a la carta. De las emisoras de radio convencionales lo poco que consumo son programas como Las Noches de Ortega, La Vida Moderna o Nadie sabe nada, que son programas para nada convencionales, grabados y, salvo el primero, con más espectadores que oyentes, porque se emiten en Youtube. ¿Cuál es tu caso?
Pues yo escucho muchísima radio en directo. Soy adicto a Catalunya Informació (que es como la Radio 5 Todo Noticias de la radio pública catalana), la escucho a diario. Cada 30 minutos repiten las noticias, y yo quizás las escucho en bucle 4 veces. Otro trastorno obsesivo-compulsivo. Además, mi coche es viejo y no tiene bluetooth ni nada, por lo que casi cada día me doy una vuelta por la FM y caigo en Cadena Dial, MaximaFM, Rac1, la SER, etc. He trabajado más de 10 años en radios convencionales haciendo directos y me siguen gustando. Eso sí, también he trabajado muchos años en programas de humor y hoy en día no puedo con ellos: haber sido guionista de humor -bajo la presión de las audiencias, los nervios entre bambalinas y las mierdas de los directivos- me ha producido un efecto rechazo que me impide reír con alguien que pretende hacerme reír.

 

Ya que estamos, recomiéndanos algunos discos que estés escuchando últimamente en el que predominen los ritmos impares, los polirritmos o los patrones atípicos en general…
A ver, lo primero que me viene a la mente son los King Gizzard & the Lizard Wizard, que van a disco por semestre, y todos ellos plagados de ritmos impares, juegos tonales… De discos no sabría decirte muchos ahora mismo, pero el año pasado presencié una velada con tres propuestas repletas de ritmos impares que me voló la cabeza: Yegor Zabelov (acordeonista bielorruso que trabaja con loops y con emoción profunda), 13 Year Cicada (quizás mi grupo europeo favorito, math-pop arriesgado y fresco) y Hassan K (solista francés-iraní que hace surf-metal-árabe la guitarra, un clarinete MIDI y un mando de la Wii, el mejor concierto para el fin de una pandemia).

 

Para terminar, frivolicemos un poco: ¿A qué renunciarías para evitar un mundo en el que solo hubiera canciones en 4×4?
Renunciaría a tocar la batería -lo que más me gusta en el mundo- si todas las baterías del mundo sonasen en ritmos impares. Entonces, me pillaría un teclado muy simple en el Cash Converters y haría melodías muy tontas, de 4×4 todas, mientras los ritmos de las baterías se van descabalgando y cabalgando de mi melodía, en modo polimétrico, cuatro contra cinco, cuatro contra siete, cuatro contra once, cuatro contra Pi… Y así podría estar hasta el amanecer de los tiempos, feliz.

 

Unas cuantas canciones favoritas de 2022. Marzo

Aquí va la lista de mis canciones favoritas de este pasado marzo de 2022.

 

 

YOLA ‘Diamond Studded Shoes – Reimagined’
Aunque lo descubrí por casualidad y en el último momento, ‘Stand For Myself’ (Easy Eye Sound, 2021) de Yola se convirtió en uno de mis discos favoritos del año pasado. El “retro country soul with bite” (The Guardian) y la poderosa voz de esta británica afincada en Nashville me cautivaron casi a primera escucha. Este año ha lanzado como single una nueva versión de la canción ‘Diamond Studded Shoes’ y claro, se ha convertido en una de mis canciones favoritas del mes.

 


 

COMPRO ORO ‘Tiempo’
En realidad esta canción la conocemos desde hace bastante tiempo, pues se publicó como single en octubre de 2020. Pero como el pasado mes de marzo vio la luz por fin ‘Estarantos’ (Desorden Sonoro, 2022), el nuevo disco de Compro Oro, que la incluye, aprovecho para recomendarla. Es mi canción favorita de la banda almeriense.

 


 

MAUSOLEO ‘Un testigo’
Las canciones de Mausoleo son de esas que ganan con cada escucha y para muestra este adelanto de su nuevo disco, que publicará Humo Internacional durante 2022. Lo del trío ha sido descrito como «devotional punk», que vendría a ser post punk de toda la vida, pero con una carga extra de oscuridad, emotividad e intensidad.

 


 

YAWNERS ‘Rivers Cuomo’
La banda liderada por Elena Nieto es una debilidad en esta casa desde sus primeros singles y en más de una ocasión se ha gritado en grupo aquello de «creo que te llama tu madre por el hueco de la escalera, creo que está gritando tu nombre por el hueco de la escalera». Así que se celebra con devoción cada adelanto de ‘Duplo’ (Montgrí, 2022), como esta canción dedicada al cantante de Weezer.

 


 

MONOPHONICS ‘Warpaint’
Creo que nunca había escuchado tanta música soul concentrada en tan poco tiempo y gran parte de culpa la tiene Colemine Records. El sello de Ohio será el encargado de publicar ‘Sage Motel’, el quinto disco de la banda californiana de soul psicodélico liderada por Kelly Finnigan, y este pinta así de bien. Soulful sounds para todos.

 


 

PINCH POINTS ‘Am I Okay?’
Raro es que pongas un programa de MRR Radio y no eches algún grupo nuevo a la buchaca. Uno de los últimos que he descubierto gracias al mítico radio show con sede en Oakland, California, es este cuarteto australiano. Publicado en marzo, ‘Process’ (Exploding In Sound Records, 2022) es el segundo álbum de los de Melbourne y ‘Am I Okay?’ es una de las canciones que seleccionaron como adelanto del mismo. Por no decir que todo es post punk y atendiendo a las etiquetas que la propia banda indica en su página de Bandcamp, llamémoslo «turbo-punk».

 


 

screensaver ‘Clean Current’
Háganle caso a mi amigo Bigote Letal, él ya dijo hace tiempo que había que escuchar a screensaver. Con su disco debut aún fresco, la banda de synth-punk de Melbourne (Australia una vez más, claro) acaba de publicar, de la mano de Upset The Rhythm, un nuevo 7″ con dos canciones. Esta fue la primera que dieron a conocer.

 


 

ROTTEN MIND ‘Lose Lose’
Que viva el punk sueco. Rotten Mind, en activo desde 2015, combinan el melódico punk 77 con toques de dark wave e incluso de garage rock, para dar forma a verdaderas colecciones de hits como su más reciente ‘Unflavored’ (Lövely Records, 2022), el quinto disco en la trayectoria de la banda de Uppsala. He seleccionado este ‘Lose Lose’ para la lista, pero realmente podría haber escogido casi cualquier canción del álbum.

 


 

NEUTRALS ‘Gary Borthwick Says’
Allan McNaughton (guitarra y voz), oriundo de Glasgow, llegó a principios de siglo a San Francisco y empezó a tocar en diversas bandas de punk de la Bay Area, hasta llegar a Neutrals en 2016. En este trío de mod-punk coincide con el batería Phil Lantz y el bajista Phil Benson. ‘Bus Stop Nights EP’ es su tercer 7″, después de un LP y dos cassettes promocionales, y esta es su canción principal.

 


 

RUDIMENTARY PENI ‘Blind Dogs’
El año pasado Sealed Records, subsello de La Vida es un Mus (Reino Unido), publicaba ‘Great War’, nuevo disco de esta mítica banda de deathrock de los 80. En este año le han sucedido las reediciones de su EP homónimo (1981) y del LP ‘Death Church’ (1983). A la primera de estas reediciones pertenece esta canción, una de mis favoritas de su discografía.

 


 

PARK ‘Réveil Heureux’
El cuarteto francés Park es la unión de Frànçois & The Atlas Mountains y Lysistrata, que aprovecharon el parón pandémico para dar forma a un nuevo proyecto musical. Un punto de encuentro entre el indie pop y el post hardcore de uno y de otros, que se ha estrenado este año con un disco homónimo (‘Park’, Vicious Circle, 2022) y con esta canción como primera referencia.

 


 

black midi ’21st Century Schizoid Man’
Para cerrar este listado, solo diré: ¡Vaya pedazo de versión de King Crimson que se marcan black midi en su EP de versiones! (‘Cavalcovers’, Rough Trade, 2022).

 


 

Hogar: “Ya no distinguimos entre nuestros intereses y nuestras necesidades”

Chimo (guitarra y voz), Javato (bajo y voz) y Oliver (batería y voz) son Hogar, un trío valenciano que factura el mejor punk que te puedes encontrar en la actualidad por estos lares. Elocuente e inconformista, Chimo atiende nuestras preguntas.

 

 

Casi dos años después de grabarse, pandemia mediante, se puede escuchar vuestro primer disco (publicado por Mata La Música y Flexidiscos). Para la edición física en vinilo aún faltan algunas semanas, el pre-order está abierto. ¿Cómo ha sido lo de tener vuestras canciones grabadas tanto tiempo y no poder mostrarlas?
Hogar se forma de manera muy natural y rápida, tres colegas que teníamos que acabar sí o sí tocando juntos. Sacamos los temas bastante rápido, sin letras, y decidimos grabarlos. Con la mala suerte de que los cabezales de la grabadora estaban dañados y la grabación queda con una ondulación rara que conforme avanza la cinta se va haciendo más notoria.
De repente nos mandan a casa. Todo mal.
Bajo el poder de la soledad y los pensamientos más limítrofes nacen las letras de Hogar. Ya se va complicando el proyecto y al salir de la cuarentena volvemos a grabar.
Por un lado la impotencia de no poder tocar y sacar de la casa todo eso que lleva uno dentro va apalancando cada vez más el proyecto y haciéndolo más distante… hasta el punto de sufrir disociación, querer cambiar las letras y cosas de esas. Desmotivación total.
Ya todo vuelve a la normalidad, y los amigos nos animan a mover el disco. Entra de nuevo el gusanillo. Van apareciendo conciertos. El hecho de tener eso ahí parado y de cogernos y decirnos: “oye, peña, ¿esto qué?”. Y lo más importante de todo, lo que nos da la última fuerza, es el apoyo de Flexidiscos y Mata La Música. No hay nada que nos haga más felices que dos amigos de forma altruista confíen en nosotros y nos acompañen en el proyecto.
Perdón, respondiendo a tu pregunta: pues ha sido hasta un alivio tardar tanto en sacarlo.
A veces es algo tan personal que uno piensa si es bueno o no exponerse emocionalmente de manera tan directa a que la gente sepa lo que hay dentro de ti. Demasiadas pistas. Hoy en día estoy totalmente orgulloso de esto. O no.

 

El disco lo grabó Nick Trampolino (Cuello), lo mezcló José Pazos (Futuro Terror) y lo masterizó el australiano Mikey Young (Eddy Current Suppression Ring, Total Control), músicos y supongo que (al menos 2/3) amigos. ¿En qué momento tuvisteis claro que queríais que se encargaran ellos?
En el caso de Mikey Young, somos muy seguidores del movimiento que hay en Australia y especialmente de ese hilo de grupos relacionados como Eddy Current, UV Race, etc. Pensamos que sería un buen plan masterizarlo con él. Pero hoy en día, viendo los resultados, casi que hubiéramos elegido a alguien con una trayectoria más punk. Eso no quita que estemos orgullosísimos del trabajo. De hecho para cosas tipo Total Control sería un candidato estupendo.
En cuanto a Nick, tiene su estudio portátil y ha sido siempre el candidato por excelencia, puesto que hace muy bien su trabajo. Y José, sabiendo cómo trabaja, empleando y exprimiendo la máxima sencillez y pureza…
No sé, creo que está todo en su sitio. Agradecer a los tres su trabajo. A Mikey no lo conocemos, ni él a nosotros, pero gracias igualmente. Y evidentemente fue el primero en cobrar, debido a la inexistente afinidad que nos une.
Para lo próximo queremos hacerlo todo nosotros, nos vemos con fuerzas de hacerlo y además creo que le va mucho al concepto del grupo.

 

Me acabo de dar cuenta de que no he escuchado vuestro disco nunca sin hacerlo al menos dos veces (o más) seguidas. ¿Qué explicación le veis a esto?
¿En serio? Jo, gracias de corazón. Esto es una cosa que no entendemos y que forma parte de la disociación adquirida con esto de Hogar. En los últimos conciertos había algunas unidades de personas cantando las canciones. Me ha llegado a parecer hasta absurdo a la vez que algo precioso y super reconstituyente. Pero ya saliendo de la autoflagelación y el victimismo, parece ser que algunas de las personas que pierden su tiempo en escuchar Hogar se han podido ver reflejadas en las letras. No sé, es muy extraño y, joder, al final la música es sentirte vulnerable, libre. Se trata de ser tú mismo y no sé, pensando que eso sería algo malo, resulta ser algo precioso. En términos musicales la música es frenética, el charles cerradito y rapidito, melodías en la voz… Esta explicación debería ser cortesía del que lo escucha. Nosotros no pensamos en nada más que en tocar los tres y ver que salía, ninguna ambición más que hacerlo lo más natural posible .

 

Si nos centramos en Valencia, lugar en el que al menos visto desde aquí la escena underground goza de buena salud, aparte de Finale, Paz SS o Podium, bandas en las que estáis implicados y que ya recomiendo yo, ¿con qué bandas os sentís hermanados?
Al final la salud es lo que importa y Valencia sistemáticamente nunca ha gozado de buena salud. Ahora hay un resurgir de bandas nuevas y es un buen momento de lanzar otro tipo de propósito para que podamos disfrutar todos, de entender que hay muchos tipos de personas y que el disfrute personal no tiene que limitar el disfrute ajeno. Y sobre todo de levantar la mirada hacia el mundo para tratar de ser mejores personas. Hay algo de lo que no se habla mucho, pero al final es lo que somos, un colectivo de personas. Pero reafirmo que el rollito de Valencia está en un momento musical brutal y hay grupazos nuevos como Perdón por todo, Mecherete, Disli, Colisión, La Culpa, Presagio, Caída o Amor, que te recomendamos muy fuertemente.

 

¿En qué medida pensáis que la existencia de espacios como La Residencia contribuyen a la proliferación de bandas en una ciudad relativamente grande como la vuestra?
Sitios como La Residencia son indispensables a la hora de educarnos con unos valores y una manera de hacer las cosas al margen de los intereses, mediante el trato directo y el trabajo en equipo, y de llevar esos valores a la práctica y a la organización. Como muchos colectivos hay situaciones en las que se les pone entre la espada y la pared a la hora de tomar decisiones de cara al público y es un trabajo que de manera individual es invisible y por eso aplaudo y valoro su trabajo. Al final es gente que trabaja y se lo curra para que haya puntos donde nos podamos expresar en función de nuestras inquietudes.

 

La primera vez que escribí algo sobre vosotros, para la gente que no os conociera, puse que lo vuestro es punk de la misma liga que La URSS, Biznaga, Futuro Terror o Nadsat. ¿Os sentís identificados con estas bandas? ¿Con qué bandas no valenciana lo hacéis?
Puede ser que Hogar esté en un punto raro a la hora de clasificar. Han llegado a decir que tenemos influencia de Carolina Durante. Por favor, vamos a ver, la única vez que los he escuchado ha sido a raíz de esa crítica y mi impresión fue que no tenemos absolutamente nada que ver. Por otro lado sí que veo bastante razonable y gratificante la comparación con Los Claveles, que oye, mira, no lo habíamos pensado, pero me la guardo, todo un halago. Por nuestra parte le veo un símil bastante guay con Rata Negra. Probablemente nos haya influenciado. O no, no lo sé, pero nos encanta Rata Negra. Con Biznaga le encuentro yo menos parecido. Con Nadsat toqué una vez con Techo Lunar en La Mistelera y fue muy familiar y bonito. Un saludo a Nadsat. Pero, igual que con La URSS, los veo más parecidos entre sí. Con Futuro Terror hay influencia directa. Alicante y Benidorm están al lado y muchos de los que hoy hacemos nuestros tejemanejes en Valencia los hacíamos más por la zona de Alicante y esta gente tenía grupos muy guays en aquella época que me petan el cerebro, como Los Plátanos por ejemplo.
Voy a poner un ejemplo menos asequible, pero sí, producto nacional y nunca mejor dicho, porque menudos canallas, jejeje: Los Nikis. También, por algún motivo, la forma de tocar nos recordaba al principio a los Adolescents o grupos así, que no podría comparar con ninguno de por aquí. Al final el sonido que nos mola a cada uno se va fusionando con el de los otros y van saliendo las bandas. Igual por eso podría parecer que una ciudad tiene un sonido característico o algo así.

 

Esta temporada invierno/primavera tenéis por fin varios conciertos fuera de Valencia en poco tiempo. Mientras tanto os habéis dejado ver alguna vez en vuestra ciudad. Pero antes de todo esto, al terminar el confinamiento, os tocó hacer unos cuantos bolos en lugares raros y de forma imprevista. ¿Qué sacasteis en positivo de aquella experiencia?
La liberación de tocar en una situación tan rara. Era el principio de la pandemia y todo el mundo pensaba que ya podríamos tocar y bailar, no sabíamos a lo que nos exponíamos y tampoco estaban las leyes tan consolidadas al respecto. A partir de ahí, ya era imposible tocar en cualquier sitio, ya que te podría caer un buen marrón. Después de eso ya mundo sillas y mesas y nosotros no andábamos nada motivados, como contaba antes. Intentamos hacer una gira por el norte y se canceló toda de un día para otro. La verdad que fue raro, tanta incertidumbre no te deja disfrutar mucho. Se queda un recuerdo variopinto.

 

En la presentación de la banda en Instagram hace dos años decíais que venís a hablar, entre otras muchas cosas, de lo frito que tenemos el cerebro de tanto mirar el móvil y aquí estoy yo, escribiendo esto directamente en las notas del mío y recordando la de veces que últimamente se me olvida lo que realmente quería hacer o buscar cuando me pongo a mirarlo en el mismo. ¿Somos una sociedad dispersa? ¿Pensáis que es algo, en términos generales, generacional o más bien global?
Lo frito que tenemos el cerebro por el móvil y otras cosas. Pero queda más actual decir el móvil y así nos entendemos todo el mundo. ¿Pero qué es el móvil? ¿Una dependencia más? ¿Una forma de esclavitud más? ¿Una manera más de controlar el mundo? ¿Otro tipo de droga más? Hay muchas otras herramientas que están en nuestras manos y que generan un efecto antagónico en nuestras vidas. En cambio lo vemos como una liberación, una herramienta hacia el futuro y hacia la mejora de nuestra calidad de vida. Podría serlo, pero no lo es. O es irrelevante o no. Y como consecuencia somos una sociedad dispersa, cero comprometida, egoísta y absolutamente controlada. Por lo tanto, dejamos todo el trabajo hecho al poder. Lo del teléfono hace referencia a cómo está hoy en día la sociedad, totalmente domotizada. Es el símbolo de la época. Somos una mierda de gente en términos generales y en términos generacionales. ¿Qué pensábamos, que la guerra no nos la íbamos a comer más? ¿Que estamos todos ya muy bien asentados con una buena flor en el culo? En conclusión, creo que el móvil va a ser un punto de cambio evolutivo influenciado por el interés del ser humano hacia un camino no natural. No sé, como en la peli de Wally, como en Benidorm… Puede que lleguemos a dejar de andar, a dejar de tener relaciones de contacto humano. No sé, una especie de futuro como en Matrix en el caso hipotético de que esto se consolide. A no ser que pase como en Mad Max, que no sabría qué decirte, jajaja. Al fin y al cabo aquí estamos sufriendo un golpe de realidad los acomodados y lo estamos viendo gracias al teléfono móvil, porque en la tele poco vamos a sacar en conclusión. Pero da igual, al final todo cae por su propio peso antes de que pase cualquier cosa determinante. Aunque de nada sirve lo determinante cuando el poder máximo manipula y tapa la realidad en función de su interés, para que sigamos viendo el móvil o drogándonos. Un claro ejemplo de la incongruencia y de que lo que te venden nunca es lo que has comprado. El pez que se muerde la cola.

 

Para acabar, pero no por ello menos importante: ¿Qué es lo que hay?
Lo que hay es lo que hay. Hollywood y Disney son propaganda militar. Nuestras ambiciones son mentiras y nuestros sueños son falsos. Como digo en la canción ‘Penúltima generación’, ya no distinguimos entre nuestros intereses y nuestras necesidades. Lo que hay es la aceptación de lo que nos pasa. La decepción, la incertidumbre, la depresión o la ansiedad son cosas horribles. Dejas de ser tú mismo y hasta que no empiezas de cero a quererte y a valorarte, como cuando gozabas de la inocencia infantil, no te das cuenta de que lo que ves es lo que hay y de que no eres el centro de la Tierra, pero sí una piedra de un gran muro. No hay más. Bueno, sí: miseria, hambre y guerra. Parece que algunos ya no nos acordamos de lo que se siente. Otros sí lo ven y otros hasta lo disfrutan.

 

Canciones y audios de Whatsapp. Tan sencillo como eso

 

Segunda entrega de este podcast de canciones y audios de Whatsapp.


1. The Feelies – Crazy Rhythms
2. Cosmic Psychos – Nice Day To Go To The Pub
3. Zoketes – A Tope
4. Carolina Durante – Urbanitas
5. Kiko Veneno – Dime A
6. La Niña de los Peines – Mírame a los ojos
7. Widowspeak -Everything Is Simple
8. Grace Cummings – Heaven
9. Fugazi – Repeater
10. The Replacements – Unsatisfied


Gracias a mis amigos Víctor, Piwi y Pepe por los audios. Y al señor anónimo también. El resto son fragmentos de podcasts que me gustan, como Media Offline de Carlo Padial o Mochila al pasado de Luis Fabra con Alberto Aparici y Danny Boy Rivera, de una canción de Solo los solo o del mismísimo Pegaso.

Unas cuantas canciones favoritas de 2022. Febrero

Sigo con mi lista de canciones favoritas de 2022 por entregas. Estas son las de febrero.

 

 

SWAMI JOHN REIS ‘Do You Still Wanna Make Out?’
Aunque en 2015 ya publicó un álbum junto a The Blind Shake (Swami John Reis & The Blind Shake ‘Modern Surf Classics’, Swami Records), el 18 de febrero se publicaba ‘Ride The Wild Night’ (Swami Records), el primer disco estrictamente a título propio del mítico John Reis, a.k.a. Speedo (Rocket From The Crypt, Drive Like Jehu, Hot Snakes, etc). Un par de semanas antes, como único adelanto, dejó caer este tremendo ‘Do You Still Wanna Make Out’. Sigue siendo el mejor en lo suyo.

 


 
 

OBONGJAYAR ‘Try’
Algunos descubrimos a Obongjayar de casualidad por su colaboración con Little Simz en ‘Point And Kill’, canción incluida en ‘Sometimes I Might Be Introvert’, uno de los discos de 2021 mejor valorados por la prensa. Pero el cantante nigeriano afincado en Londres, de nombre Steven Umoh, forma parte del roster de representados de September, junto a una tal Adele. En mayo de este año verá la luz su primer largo, discurriendo por los terrenos del modern soul, el spoken word o el afrobeat. ‘Try’ es el segundo de sus adelantos.

 


 
 

KENDRA MORRIS ‘Nine Lives’
‘Nine Lives’ es la canción que da título al nuevo disco de Kendra Morris, cantautora nacida en San Petersburgo, pero la de Florida, y afincada en la ciudad de Nueva York. El disco se puso a la venta el pasado 18 de febrero a través de Karma Chief Records, una división de Colemine Records. Con Aaron Frazer, Black Market Brass, Durand Jones & The Indications, Black Pumas o Joey Quiñones en su catálogo, el sello de Ohio es toda una referencia actual en «soulful sounds» y Kendra Morris lo reafirma.

 


 
 

PEACH PIT ‘Vickie’
Mañana sale bajo el sello RCA/Sony ‘From 2 to 3’, el tercer disco de los canadienses Peach Pit. ‘Vickie’ es el último adelanto que hemos podido escuchar del mismo. Indie pop del de toda la vida: frescura, estribillos pegadizos y el saber ponerle un punto de humor, autoparódico incluso, a los asuntos serios.

 


 
 

BRAIN TOURNIQUET ‘MACHINE GUN’
Uno de mis sellos favoritos de los últimos tiempos es Iron Lung, de Seattle. Es el responsable, entre otros muchos discos recomendables, de ‘Brain Tourniquet II’, segundo disco de esta banda de powerviolence de Washington DC. Creo que el nombre de la banda es lo suficientemente explícito, como Desatranques Jaén, pero si no te imaginas cómo puede sonar, puedes escuchar este ‘Machine Gun’, que es bastante representativo.

 


 
 

ORVILLE PECK ‘C’Mon Baby, Cry’
De Orville Peck lo primero que te llama la atención es la máscara con flecos que siempre oculta su rostro… hasta que lo escuchas cantar y vienen a tu cabeza nombres como Roy Orbison, Elvis Presley o Chris Isaak. El canadiense comenzó su carrera de la mano de Sub Pop, pero pronto dio el salto a Columbia Records, con quien publicará ‘Bronco’, su segundo álbum en abril. De momento ha adelantado cuatro canciones, agrupadas bajo el nombre ‘Bronco: Chapter 1’, con este ‘C’mon Baby, Cry’ como tema destacado.

 


 
 

SWAMP DOGG ‘I Need A Job’
A punto de cumplir 80 años, Jerry Williams es sin duda un músico de culto. Con apenas 14 años, con Little Jerry como nombre artístico, comenzó a publicar discos. En 1970 pasó a llamarse Swamp Dogg y desde entonces no ha parado. A día de hoy sigue publicando imponentes canciones de soul, funk y rhythm & blues como esta ‘I Need A Job’, perteneciente a ‘I Need A Job… So I Can Buy More Auto-Tune’ (Don Giovanni Records).

 


 
 

WIDOWSPEAK ‘The Jacket’
Widowspeak, el dúo formado por Molly Hamilton y Robert Earl Thomas, ya aparecieron en la selección de canciones del mes pasado. Así que su nuevo álbum, que se titulará como esta canción y será el sexto largo en la trayectoria de los de Brooklyn, pinta bastante bien. Lo comprobaremos pronto, el disco se publicará el 11 de marzo a través de Captured Tracks.

 


 
 

SUPERCHUNK ‘Endless Summer’
¿Superchunk? No hace falta que digas nada más. Siempre bien. Más de 30 años en activo y nunca fallan, siguen publicando discos maravillosos, con joyas imperecederas del power pop como este ‘Endless Summer’.

 


 
 

AYAX FT DOLLAR ‘Guajiro’
Ayax tiene nuevo disco, ‘Juglar del siglo XXI’, el segundo en solitario sin su hermano gemelo Prok. El granadino está en estado de gracia, dinámico y elocuente como pocos, tirando barras contundentes y atreviéndose con cualquier base. En ‘Guajiro’, uno de los temas que sirvió de adelanto a este disco, con la colaboración de Dollar, le da a los ritmos latinos con tremenda sutileza.

 


 
 

ERIN RAE ‘Modern Woman’
La de Erin Rae McKaskle es una de las grandes voces del country folk actual, junto a Katie Crutchfield (Waxahatchee) o Kacy Anderson (Kacy & Clayton), en mi opinión. Lo demuestra en este ‘Modern Woman’, una de las canciones principales de su nuevo disco, ‘Lighten Up’. Aquí la cantante de Nashville muestra un enfoque sonoro en el que se dan la mano el country de Tennessee con los ramalazos neopsicodélicos de California.

 


 
 

YONDER MOUNTAIN STRING BAND ‘Into The Fire’
La banda de Colorado es un clásico del bluegrass moderno con más de 20 años de trayectoria, que sigue demostrando que con mandolina, banjo, violín, guitarra y contrabajo se pueden seguir creando hits del estilo como este ‘Into The Fire’. Fue el primer adelanto de ‘Get Yourself Outside’, su nuevo disco recientemente publicado.

 


 
 

Unas cuantas canciones favoritas de 2022. Enero

Han sido unos cuantos los discos que en los últimos años, al ir filtrando con la intención de hacer una selección de favoritos, he descartado, pero con la extraña sensación de que, si bien el álbum al completo no me terminaba de convencer, llevaba alguna de mis canciones preferidas de la temporada. Así que, como muchos otros hacen y como creo que corresponde a la actualidad, en un momento en el que los discos se van anticipando parcialmente con adelantos diversos y en el que es habitual consumir la música de forma fraccionada a través de plataformas de streaming, he hecho mi propia lista de canciones favoritas de 2022 para ir actualizándola sobre la marcha. Durante las últimas semanas he ido compartiendo en algunas redes sociales las canciones que más me han gustado, en lo que a estrenos se refiere, algo que supongo que seguiré haciendo, pero el propósito final es recopilarlas en un post en este blog al finalizar el mes. Aquí va el primer listado. Enero.

 

 
 

WIDOWSPEAK ‘Everything Is Simple’
Primer adelanto de ‘The Jacket’, próximo disco del dúo formado por Molly Hamilton y Robert Earl Thomas. El sexto largo de los de Brooklyn se publicará el 11 de marzo a través de Captured Tracks.

 


 

LOVE, BURNS ‘Dear Claire’
Este próximo viernes se publica, a través de Austin Town Records entre otros, el nuevo disco de Love, Burns. Este nuevo trabajo del proyecto personal del neoyorquino Phil Sutton, de Pale Lights y Cinema Red and Blue, se titulará ‘It Should Have Been Tomorrow’ y de momento solo hemos podido escuchar este adelanto.

 


 

SPRINTS ‘Little Fix’
El año pasado publicaron uno de mis trabajos favoritos de la temporada, el EP ‘Manifesto’, y el 11 de marzo, una vez más de la mano de Nice Swan Recordings, vuelven a lanzar otro EP: ‘A Modern Job’. Ya conocemos tres de los cinco temas que contendrá el nuevo trabajo del cuarteto de Dublín, el último de ellos este.

 


 

VULK ‘Vulk Ez Da’
Para mí uno de los mejores discos publicados en lo poco que llevamos de año es el de Vulk. La banda de Bilbao ha fichado por Montgrí, el sello de Cala Vento, que está reuniendo a algunas de las bandas más interesantes del panorama estatal actual, para lanzar su primer trabajo cantado en euskera. Pero como esto va de canciones, si hay que destacar una, me quedo con la que da título al álbum.

 


 

GRACE CUMMINGS ‘Heaven’
Otro disco con muchas opciones de convertirse en uno de mis favoritos de la temporada es ‘Storm Queen’ (ATO Records), segundo álbum de la australiana Grace Cummings, con este enorme ‘Heaven’ como abanderado. «There is no God / There is no King / Yet you hear, you hear / A singing / Ave / Ave Maria / Ave / Ave Maria».

 


 

NACHO VEGAS ‘Belart’
Con Violética (2018) me reconcilié con la música de Nacho Vegas, después de bastante tiempo sin prestarle demasiada atención. El discurso del asturiano, tanto en su lírica como en lo expuesto a través de entrevistas, me parece de lo más sugerente. ‘Mundos inmóviles derrumbándose’ (Oso Polita Records) es otra muestra de ello y mi canción favorita del disco es la que lo abre, ‘Belart’.

 


 

THE SADIES ‘Message to Belial’
Después de casi 30 años en activo, los canadienses The Sadies siguen haciendo canciones tan maravillosas como esta. La situación actual está retrasando la publicación de su nuevo disco, que saldrá con el sello Yep Roc Records, y sus giras, pero lo que llevan adelantado son dos temazos.

 


 

NOGA EREZ ‘Industry Baby’
Dos de mis discos favoritos de 2021 (‘Kids’ y ‘Kids (Against The Machine)’, City Slang) los publicó Noga Erez. Y la racha sigue. Ojo al pedazo de versión de Lil Nas X que se marca aquí la cantante, compositora y productora israelí, con vientos, piano, etc, etc.

 


 

THE BABOON SHOW ‘Have a Party with Me’
«Here is the whiskey / Here is the beer / And here’s my moonshine / It’s fine this year / And here’s the wine that I made out of cherries / So now I’m gonna be more cockeyed than Chuck Berry». Así comienza la cara B del nuevo 7″ de estos suecos, que puedes conseguir en nuestro país a través de HFMN Crew. Difícil decir que no a esta invitación a base de rock and roll escandinavo.

 


 

THE BUG CLUB ‘Intelectuals – Money Version’
Cada vez más fan de estos galeses. Otro de mis descubrimientos favoritos de 2021. Regresan con un single digital con cinco temas nuevos en un solo corte, grabados en una sola toma, en el orden en que fueron escritos. Y como «cara B» otra versión de la canción que da título al EP, que destaco aquí.

 


 

CAROLINA DURANTE ‘Urbanitas’
Esta no me la esperaba. Carolina Durante nunca llegará a ser mi «nuevo grupo favorito», supongo que por una cuestión generacional. Pero a la vez es una banda a la que me gusta que le vaya bien, por lo que sea, y a la que siempre presto atención cuando publican algo, aunque luego a la larga no estén entre lo que más escucho. Sin embargo, después de unas cuantas escuchas de ‘Cuatro Chavales’ (Sonido Muchacho), la realidad es que me parece que está muy bien. Sobre todo, me parece un disco con un buen número de hits, en el que destacan curiosamente canciones que no habíamos escuchado hasta la semana pasada. Y contra pronóstico, mi favorita es ‘Urbanitas’, que supongo que es un tema que no entraba en las quinielas. No sé, será porque me suena ramoniano o será por esos «oooooh oh oh» de en medio. ¿Quién puede resistirse a un buen «oooooh oh oh»?

 


 

BRENT COBB ‘Old Rugged Cross’
‘And Now, Let’s Turn to Page…’ de Brent Cobb es un discazo. El cantautor de Georgia, Estados Unidos, grabó en Nashville, con su hermano Dave como productor, una canción propia y ocho interpretaciones de clásicos del gospel tan estupendas como esta.

 


 
 

12 discos estupendos que he descubierto en las listas de final de año

 

Durante 2021 escuché un montón de discos. Por ahí tenéis mi lista de favoritos. Inicialmente eran 70 los incluidos, pero siempre quedan cosas buenas por descubrir. Así que, tras ir repasando un buen número de listas de favoritos ajenas publicadas a final de año, he ido ampliando un poco la selección y compartiendo en algunas redes sociales las novedades, que recopilo hoy aquí en este post.

 

CHAIN WHIP ‘TWO STEP TO HELL’ (NEON TASTE RECORDS / DRUNKEN SAILOR RECORDS)
De la siempre recomendable lista de hardcore punk de Chevas del fanzine Enciende la mecha. Cuarteto de KBD punk de Vancouver, Canadá. Seis canciones, nueve minutos. Tan sencillo como eso.

 

 

HOWLIN RAIN ‘THE DHARMA WHEEL’ (SILVER CURRENT)
Un poco de psychedelick rock nunca viene mal. Desde Oakland, California, con Ethan Miller de Comets on Fire al frente.

 

 

YANTI BERSAUDARA ‘YANTI BERSAUDARA’ (LAMUNAI RECORDS)
Este en realidad se publicó en 2020, pero da igual, porque es una reedición. Folk psicodélico desde Indonesia. Publicado en 1971 originalmente y reeditado por Lamunai Records, sello de Jakarta. Una recomendación del maestro Sven Wunder en el magazine francés Benzine.

 

 

FULL OF HELL ‘GARDEN OF BURNING APPARITIONS’ (RELAPSE RECORDS)
No le pido otra cosa a un disco de metal extremo. Rápido, variado y doce cortes, veinte minutos. Con la garantía de Relapse.

 

 

LES FILLES DE ILLIGHADAD ‘AT PIONEER WORKS’ (SAHEL SOUNDS)
Otra joya de Sahel Sounds. Tuareg rock desde Níger. Disco grabado en directo en otoño de 2019 en el centro cultural Pioneer Works de Brooklyn.

 

 

COOL GHOULS ‘AT GEORGE’S ZOO’ (EMPTY CELLAR RECORDS / MELODIC RECORDS)
Este casi se me pasa por alto. Lo había visto en alguna que otra lista sin llegar a escucharlo, hasta que lo vi en la lista de canciones favoritas de mi amigo Manel Abella. Desde San Francisco, pop, psicodelia y geniales armonías vocales.

 

 

CURTIS HARDING ‘IF WORDS WERE FLOWERS’ (ANTI)
Como he leído por ahí, «generoso y caleidoscópico álbum de soul» el de este cantante y compositor afincado en Atlanta.

 

 

BONDO ’77’ (UNIVERSAL FREEING OBJECT)
En Aquarium Drunkard describen a Bondo, banda de Los Ángeles, como una mezcla entre el ‘Spiderland’ de Slint y unos Fugazi instrumentales.

 

 

PINKPANTHERESS ‘TO HELL WITH IT’ (PARLOPHONE RECORDS)
De Tik Tok a Parlophone. PinkPantheress es el pseudónimo de una joven cantante, compositora y productora de Bath, Reino Unido, cuyas canciones se empezaron a popularizar gracias a los vídeos que ella misma subía a la mencionada red social. Recientemente le concedieron el premio BBC Sound of 2022.

 

 

NISEMONO 偽者 ‘DEMO’ (TOXIC STATE RECORDS)
Otro disco de la lista de Enciende la mecha. Banda de hardcore punk de Nueva York, pero con inspiración japonesa, compuesta por veteranos de la escena DIY que también han formado parte de grupos como LOTION, Dollhouse o Warthog.

 

 

YOLA ‘STAND FOR MYSELF’ (EASY EYE SOUND)
Nacida en Bristol, Reino Unido, pero afincada en Nashville, de Yola dicen en The Guardian que hace «retro Country soul with bite» y a mí me parece bien.

 

 

BUFFET LUNCH ‘THE POWER OF ROCKS’ (UPSET THE RHYTHM)
Disco debut de esta banda escocesa que se autodefine como creadora de pegadizas canciones pop incompletas que parecen al borde del colapso.

 

Ana Andújar (Dare to be one of us, girl): «El curro es de las artistas, por eso para mí es imprescindible hablar en plural»

Dare to be one of us, girl se autopresenta como «un webzine con el propósito de poner en valor el trabajo de nuestras artistas favoritas bajo un punto de vista inclusivo, reivindicativo y un poquico macarra». Y en esas lleva, con Ana Andújar siempre al frente, desde 2014, reivindicando el DIY, la diversidad, la hermandad y el amor por la creatividad. Pero seguro que ella te lo puede explicar mucho mejor que yo, así que entremos en materia…


 

Volvamos a 2014. ¿Cómo nace Dare to be one of us, girl? ¿Parte de una necesidad personal de expresarte, canalizándolo a través del feminismo, el DIY y la exposición del trabajo de tus artistas favoritas, o parte de tu activismo feminista, en búsqueda de un medio de visibilización para esta causa?
Todo empieza con la pretensión de calmar mis ínfulas periodísticas, que tenía bajo tierra al dedicarle tanto esfuerzo a la docencia. Me interesaba hablar de la cultura que consumía, punkarrismos y fanzines cuyo espíritu más macarra y auténtico personificaban mis amigas. Luego me di cuenta de que casi toda la atención se la llevaban los chicos, y a pesar de que en todos los saraos estaba rodeada de colegas que dibujaban, hacían fotos o escribían, ahí estábamos todas viendo a los patanes de nuestros novios tocar la guitarra en el 12&medio. Quería crear un archivo artístico de mujeres en Murcia para reconocer ese trabajo que por entonces yo pensaba que tenía poco crédito en la escenita y los medios (sí, esos dos que piensas) alternativos de la ciudad.
Por todo esto, el blog ya era feminista per se, y yo también he ido aprendiendo en estos años. En una de las primeras entrevistas que me hicieron contesté un montón de gilipolleces al respecto: me comió el síndrome de la impostora y estaba a la defensiva con las preguntas del chaval que se me puso delante y que yo creía solo iba a tocarme las narices. Le solté buenas perlas, como que a nadie le importaba Simone de Beauvoir y cosas así: la esencia de la idea sigo manteniéndola, pues para ser feminista no tienes que estudiar como si te presentaras a la Fulbright (véase el valor ideológico a la causa de personas mayores analfabetas), pero ahora puntualizaría. Leer y formarte, entender otros puntos de vista y compartir experiencias, siempre te harán más fuerte, sobre todo cuando el enemigo a batir se nos está poniendo farruco. El feminismo está además en desarrollo y cambio constante. Me he dado cuenta que el activismo blanco y universitario, como puede ser el de este medio, tiene que dejar espacio a otras voces y es un gustazo poder aprender de otras compas. También he visto que gracias a la turra estos años con ‘DareGirl’ algunos amigos y conocidos (remarquemos que «cuanti» más guay y moderno suele ser el espectro, «cuanti» más machismo te puedes encontrar) han cambiado su pensamiento y evolucionado con nosotras. La intención es estar presentes todo el rato, atender a la diversidad y no retroceder ni un paso.


Aunque en ocasiones cuentas con la colaboración de compañeras en el webzine, el grueso de contenidos del mismo llevan tu firma. No obstante, desde el comienzo has usado el plural mayestático en tus textos. ¿Se puede considerar esto una forma de sororidad? ¿Una invitación abierta a nuevas compañeras a formar parte del proyecto?
El webzine se nutre del trabajo de las artistas, mostrándolo y reivindicándolo, bien como reseña, post o entrevista. El curro es suyo, por eso para mí es imprescindible hablar en plural. Por lo demás, la puerta siempre ha estado y estará abierta a colaboraciones de amigas y desconocidas que saben bien el rollo de ‘DareGirl’ (básicamente, hablar de lo que te mole, y si tiene carga social, mejor). Somos una plantilla inestable y a la vez un club sólido. Hay gente que lo sigue desde el principio y eso también es colaborar y apuntalar el proyecto. Siendo una página que se hace desde la gratuidad absoluta, sin publi ni ataduras -nadie cobra ni paga una perrica aquí- tiene más mérito que todo artículo o colaboración, hasta la imagen de la página que debo en su día al Comodín de la Helvética y a Casa Chiribiri en los últimos tiempos, me ha llegado como una forma de apoyo, porque ellxs también conectaban con el proyecto. Mucha suerte la mía.


Toda disciplina (no solo) artística tiene hueco en ‘Daregirl’, pero diría que la música y la literatura son las que más peso tienen en el proyecto. ¿Es algo premeditado o simplemente van surgiendo así los contenidos?
Se me ve el plumero porque son las disciplinas que más me apasionan. Desde el principio lo sentenciamos en la web: esto no era un medio de información, sino un webzine totalmente subjetivo donde se hablaba solo de las cosas que nos ponían erectas. Al principio alguien comentó que el tono era demasiado buenista, porque solo se escribían críticas positivas, que nos gustaba todo. Pues claro, para poner peña a caldo ya tienes el twitter de Soto Ivars. La literatura y la música que encuentras aquí es la que me toca el corazón: lo mismo te vale para echarte a llorar en los brazos de tu bestie que te anima a salir hasta amanecer sin recuerdos en un carguero hacia Rota o te dan ganas de echarte a la calle a quemar cositas.


Repartes las publicaciones por días: música los lunes, literatura los martes, «arty» los miércoles… ¡y los jueves Murcia! ¿Piensa global, actúa local?
Era la idea principal, centrarse en Murcia. Y ocho años después no iba la cosa mal encaminada, porque sigue habiendo cantera en la que picar. Esta región tiene taras muy gordas respecto a la educación y la cultura, empezando por quien está al cargo y siguiendo por las políticas de amiguismo que solo dejan crecer a unxs cuantxs. Gracias al webzine he conocido a peña increíble, y seguro que hay artistazas que se me escapan, pero sigo con el objetivo de recopilar el talento femenino (por muy chusca que suene esa frase ahora) para demostrar(me) que Murcia no es tan rancia como a veces a nosotras mismas nos parece.


 

En 2019, para celebrar el quinto aniversario, publicaste un fanzine con un recopilatorio en cassette. ¿Tienes intención de repetir la experiencia?
Como fan incondicional de los fanzines, crear una versión física de DareGirl era algo que me hacía muchísima ilusión. Con todas mis taras sociales es una suerte que me rodee de personas que comparten esas ganas de llevar este webzine adelante. Empezando por Mati de Chiribiri, que es una gestora de locuras estupenda, pasando por las artistas que cedieron sin miramientos su obra (fotos, relatos y canciones, la mayoría inéditos y creados para este zine) hasta las amigas que siempre están ahí para apoyarte en los saraos y de paso gozarse una fiesta.
Precisamente ahora estamos a punto de repetir la experiencia con otro artefacto colaborativo que pone en valor algunas joyitas locales y que a la vez traspasa fronteras murcianas. Lo presentaremos muy pronto, a principio de año, y pinta guapante.


Has formado parte de nuestro programa de radio, ahora en standby, y has participado en alguna ocasión en el podcast Ruda FM. En estos tiempos de espacios multimedia y gente polifacética, ¿te has planteado la opción de ampliar Dare to be one of us, girl a algún formato audiovisual?
Para las personas que nos gusta escribir, escuchar nuestra propia voz o vernos en un vídeo oscila entre el pánico y la brujería. Estoy convencida que ‘DareGirl’ ha crecido lo suficiente para funcionar en directos y twitches varios, pero tenemos el hándicap de que soy una millenial posmoderna que se siente vieja de cojones, así que de momento nos veremos por escrito.
Otra cosa es sentarte con amigxs a charlar y hacer la pava, que básicamente era lo que más me gustaba de Tímpanos y Luciérnagas. Creo que el formato era una chulada, y los eventos de radio en directo por locales de Murcia, también apoyando a creadorxs y autónomxs fue algo muy grande que, por muchos stories que ahora caigan, yo no he visto después en la ciudad. Como todo lo que hacemos en esta casa, fuimos pioneros cuando a nadie le importaban un carajo los podcasts y se paró cuando despuntaba. Siempre hemos tenido mucho ojo para medir el éxito. Me gustaba mucho verme en mitad de ese divertido guateque cipotesco y lo echo bastante de menos. Respecto a Ruda FM, Irene Bebop fue la primera persona que me entrevistó y de ahí ya salimos colegas. Ella sí que hace una labor increíble, usando la radio como arma activista sin complejos y tratando temas sociales y emocionales, llevando el podcast a espacios que importan. En ‘Dare’ hacemos más feria, pero lo suyo sí es marcar la diferencia.


Otro de los proyectos en los que estás involucrada es el Club de Lectura Feminista de Murcia. Cuéntanos algo sobre este.
El Club de Lectura ha supuesto pasar de lo digital a lo físico en todas sus formas. Tomando la iniciativa del club de La Tribu en Sevilla utilizamos el webzine para crear dos grupos de lectura que han crecido sin parar, llevándome a conocer a tipas maravillosas, hablando de socias y autoras. Se ha convertido en batallón de terapia, juergas muy locas y amistad salvaje. Leer, a veces, también leemos.


Ya que estamos a final de año, a modo de recapitulación, aprovecha para recomendarnos tus favoritos del 2021, ya sean obras, eventos, etc.
Precisamente hemos andado jodidas de eventos en vivo, esos conciertos o presentaciones que es lo que más hace conectar con las artistas. Quedándome en lo nacional, sí que han pasado cosas que te hacen conservar la esperanza en otro tipo de cultura. El centenario del nacimiento de Carmen Laforet ha acercado su novela “Nada” a un tipo de público distinto, y en nuestro club fue un verdadero bombazo. También fue de traca la presentación en Murcia este noviembre de ‘Feminismo Bastardo’ de María Galindo, esclafada patiabierta en el púlpito de la Facultad de Derecho de la Merced, seguramente en el mismo donde otros señoros sentaron cátedra con sus santos testículos. He tenido la inmensa suerte de entrevistar, y hasta hacer amistad, con la cantante y poeta Laura Sam y la ilustradora Ilu Ros, dos talentazos que podemos llamar “nuestras” y que han creado las obras del año, lo que será el disco de electrónica y spoken Word de la primera, y la biografía ilustrada ‘Federico’ de la segunda. Lo que más he echado de menos ha sido la música en directo, pero aún así han habido alegrías: las Tiburona se marcaron bolazo en el Watusi de Valencia, demostrando que se puede ser igual de cafre que sus compañeros de cartel; el Funtastic de Benidorm sobrevivió con su versión “rara” y lxs valencianxs “Podium” aprovecharon su oportunidad, estableciéndose su vocalista Africa Mansaray como frontwoman indiscutible; y mención especial para el Ruidismo de Bullas: top de bandas con presencia femenina (de las leyendas Iluminados a las fresquérrimas Lisasinson) sin necesidad de medir cuotas ni hacer “escenarios especiales támpax”. Esperemos tener mucho más material para el 2022.


Para terminar, ¿para cuándo lo de dar el salto al otro lado y montar tu propia banda?
Con la de bandas de tíos que he visto que sonaban como el culo, no sé por qué todavía me importa mi falta de talento musical, pero algo de eso pesa. Con todo, quede aquí abierta la convocatoria de “cuanto peor, mejor”: amiga, montemos una banda.


 

Miguel Carratalá de la Fuente (Un Fulgor de Moda Antónima): «Cualquier plataforma de streaming te descubre en una tarde más música de la que vamos a escuchar en la vida»

Miguel Carratalá de la Fuente es un personaje imprescindible a la hora de revisar la escena musical de Alicante en los últimos 25 años. Componente de bandas como Qualude o flyingpigmatanza, hace ya unos cuantos años que se embarcó en la aventura de organizar conciertos bajo la denominación de Un fulgor de moda antónima. Miguel y su promotora son, parcial o totalmente, los responsables de nombres que marcan cada temporada la agenda de conciertos en la provincia alicantina como Sonidos Globales, Mfest, Transtropicalia, Ciclo Alhambra Las Cigarreras o Atiende!


 

La reactivación de la actividad para los promotores musicales, igual que para los artistas, no está siendo todo lo fluida que nos gustaría. A las restricciones que han marcado la agenda, obligando a cancelar o aplazar algunos eventos, por su inviabilidad, se están uniendo las cancelaciones a última hora de conciertos por positivos en covid de músicos. ¿Os habéis visto muy afectados por estas circunstancias?
En los dos últimos años ha habido cancelaciones y fechas que se han tenido que posponer varias veces por causa de la COVID. En este sentido Atiende! este año ha sido muy complicado de organizar.


Acaban de terminar los conciertos de Atiende, con doble programación, y ya debe estar a la vuelta de la esquina el anuncio de la programación de Sonidos globales. ¿Nos puedes adelantar algo?
Así es, acabamos de concluir la novena edición de Atiende! En la que hemos abierto una nueva línea de programación dirigida a descubrir la historia y la cultura de Alicante, una ciudad que creemos debe empezar a creer en sus encantos y gran atractivo como posible destino cultural.
De Sonidos Globales, claro: que tiene un cartelón este año, que comienza el 12 de marzo con el concierto de Lee Fields y que sigue los siguientes meses con propuestas muy gordas como Rodrigo Leao Ensamble, Imarham o Maria Rodés.


En las redes sociales de Un fulgor de moda antónima ya hemos podido ver algunos de los conciertos previstos para el año que viene. ¿Algo que añadir?
El año que viene promete buena y variada guayaba musical. Cosas especiales como el concierto de Dean Wareham, líder de Luna, tocando en directo ‘On Fire’, el mítico disco de Galaxie 500. La presentación del ultimo trabajo del galés Gruff Rhys (Super Furry Animals), algo que nos parece de locos. El concierto de los míticos Arrested Development. Y de otro palo muy diferente, pero que nos parece un notición también, el concierto de los argentinos Damas Gratis, uno de los principales representantes de la cumbia villera.


 

Una de las características de tus programaciones es que hay hueco por igual para los clásicos imperecederos como para las nuevas propuestas. ¿Cómo acoge tu público los nombres menos conocidos?
Habría que preguntárselo a ellos; pero supongo que depende de la propuesta, a veces de forma sorprendente y otras muy por debajo de las expectativas.


¿Has conseguido una base de gente que, fiándose de tu criterio, acuda regularmente a los conciertos que programas independientemente de quien actúe?
Jajajaja. No te voy a negar que comenzamos en esto con esa idea, no la de instaurar mi criterio o gusto musical a nadie, pero si la de crear un sello de calidad reconocible que la gente pudiese apreciar poco a poco, concierto a concierto. Pero la realidad es que la gente reacciona a su aire, dependiendo de la propuesta o proyecto que se proponga. Ahondar más en este asunto sería ponernos ya ha hablar de sociedad, de cultura. Y de territorio.


Ya que estamos, ¿por qué no aprovechas para recomendarnos unos cuantos grupos que creas que están recibiendo menos atención de la que merecerían?
Cualquiera de las plataformas que hay en Internet te descubre en una tarde más música de la que ni tú ni yo vamos a poder escuchar en nuestras vidas. Yo voy a recomendar solo una cosa, el nuevo disco de Fajardo con Trilitrate, pero solo con la condición de que le dediquéis tiempo.

 

 

 

Cuando nos conocimos hace 20 años fue porque acudía con frecuencia a ver conciertos en Alicante, sobre todo en la Sala Stereo. En aquella época miraba casi con más interés la agenda de conciertos en vuestra ciudad que la de la nuestra. Después de unos años en los que se invirtió esto, hace ya un tiempo que me pasa algo parecido, no por falta de propuestas aquí, simplemente porque me llama más la atención lo que programáis promotoras como la tuya o Santa Leonor. ¿Hay alguna posibilidad de que estas programaciones crucen en algún momento la frontera provincial y se repliquen en Murcia?
Gracias. Al parecer desde la distancia se ven las cosas diferentes, porque a mi me sucede algo parecido con Murcia. La respuesta es sí, tenemos mucha ilusión y hay planes para acercar en 2023 uno de nuestros proyectos a vuestra ciudad.


Uno de los festivales de lo que mejor recuerdo guardo es el Transtropicalia, tanto en su ubicación secreta como en la Isla de Tabarca. En un futuro menos distópico, ¿te plantearías retomarlo?
Transtropicalia significa mucho para nosotros, es el evento que reúne todas nuestras deseos culturales, nunca lo hemos abandonado realmente, sin duda regresará en el mejor momento, cuenta con ello.


Para acabar, hablemos de tu otra faceta, la de músico. Después de formar parte de bandas como Qualude o flyingpigmatanza, el último grupo en el que hemos podido escucharte es Turiste Terroriste, en la que cambiabas tu habitual bajo por la batería. ¿Te queda tiempo para meterte en el local de ensayo? ¿En qué andas ocupado últimamente?
Que va, no tengo ni tiempo ni local de ensayo ahora mismo. Deseo volver a encontrarle un hueco en mi vida, me gusta mucho tocar con gente y hacer ruido. Pero acabo de ser padre hace poco. Ya sabes, ¿no?