¡Hablemos de rickrolling!

 

Quería yo compartir esta mañana un vídeo de ‘Drive my car’ de The Beatles en Facebook y por error ha salido otra canción de procedencia desconocida. Claro, esto me ha recordado a aquella bonita costumbre que se puso de moda hace algún tiempo: alguna gente se dedicaba a trolear para que, cuando intentabas escuchar o descargar algo, en vez de lo esperado, sonara siempre el ‘Never gonna give you up’ de Rick Astley. ¡Nunca sabías cuando te podría tocar a ti!

 

Yo fui víctima en una ocasión, intenté descargar un disco de Animal Collective y en vez de aquel álbum me bajé sin saberlo una carpeta en la que todas las pistas eran la dichosa canción de nuestro pelirrojo favorito.

 

Para cerrar el círculo, resulta que acabo de solucionar una incógnita que tenía desde hace algo más de un mes, cuando me llegó un pedido de Todocolección con un montón de discos y una moneda de 50 céntimos. No lo recordaba, pero aunque ya tengo el LP que abre la mencionada canción, pedí el single de la imagen adjunta. ¡Dos versiones del ‘Never gonna give you up’ por 45 céntimos! ¿Cómo podría resistirme a esa oferta?

 

Nunca me llegó. ¿Podría considerarse esto rickrolling inverso? ¿Estoy en paz con el señor Astley?